La octava maravilla del mundo en Nueva Zelanda
Un grupo de científicos, creen que es posible que hayan encontrado la ubicación exacta de la octava maravilla del mundo, un majestuoso monumento de origen natural que lleva enterrado más de 130 años, a causa de un catastrófico evento que tuvo lugar durante el siglo XIX.
Las Terrazas Rosas y Blancas
Este era el nombre con el que era conocido este increíble monumento natural, el cual estaba conformado por una serie de diversas capas de rocas, compuesta de minerales que le daban una coloración rosada y blanca. Estas, fueron la atracción turística más importante de Nueva Zelanda y el hemisferio sur durante el siglo XIX.
De acuerdo con los expertos, las formaciones rocosas datan de hace 1.000 años, mientras que el sistema hidrotermal data de hace 7.000 años. Siguiendo esta línea, viajeros de todas partes del mundo se transportaban en barco hacia esta región, para poder ver las terrazas y bañarse en sus aguas.
La erupción del Monte Tarawera
En el año 1886, el Monte Tarawera, un volcán activo ubicado en el Lago Rotomahana, entro en erupción y se produjeron diversas inundaciones de lava, entre las consecuencias desastrosas que tuvo este evento, estuvo la destrucción de las Terrazas Rosas y Blancas.
Anteriormente, se creía que las terrazas se habían hundido en el fondo del lago, pero los investigadores afirman que se encuentran enterradas en la playa del lago.
Los diarios de Von Hochstetter
Siguiendo este orden de ideas, los científicos utilizaron los diarios del geólogo Ferdinand Von Hochstetter, en el cual, se encontraban descripciones de las terrazas y su ubicación, tiempo antes de la erupción volcánica de 1886.
Fuente del vídeo: Misterios Sin Resolver
Asimismo, los científicos descubrieron que las terrazas se dividieron en tres fragmentos, y creen firmemente que no están completamente destruidas, y que se conservan en buen estado. Finalmente, los investigadores creen que, con la colaboración del gobierno y la ciencia, sería posible recuperar este bello monumento natural.