Teotihuacán, la misteriosa ciudad antigua ubicada en México

Teotihuacán es una ciudad antigua ubicada en el Valle de México, ha llamado la atención de los expertos durante mucho tiempo debido a que tiene una gran complejidad arquitectónica, poco común para la época. Además, cuando se mira la ciudad desde el cielo, tiene un parecido con de un tablero de circuitos con dos grandes chips procesadores.

Una ciudad de origen desconocido

Esta antigua ciudad fue construida por una civilización antigua desconocida por nosotros. El nombre que tiene actualmente, fue dado por los Aztecas, su traducción significa “lugar donde los hombres se convierten en Dioses”, y fue llamado así, debido a que cuando los Aztecas la encontraron, creyeron que era una ciudad construida por los Dioses.

Sin embargo, no sabemos quiénes la construyeron ni cuál era el nombre real de esta ciudad.

Historia conocida de Teotihuacán

Los registros históricos que se tienen de esta ciudad, han demostrado que cerca de los inicios de la era cristiana, la ciudad de Teotihuacán no era más que una villa. Luego, excavaciones realizadas en la Pirámide de la Luna, revelaron que las primeras estructuras importantes fueron construidas en este período.

Después, durante el período clásico, la ciudad mejoró su reputación notablemente y se convirtió en un importante centro político y comercial, además tenía una población de entre 100.000 y 200.000 habitantes, con una extensión territorial de 21 kilómetros cuadrados. Aunque, no se sabe cuál era la etnia de estos habitantes.

Algunas teorías apuntan a que los habitantes pertenecían a los Nahuas o los Totonacas.

Vía Ancient Aliens

Leyendas sobre Teotihuacán

En la tradición de los Nahuas, se creía que la ciudad estaba habitada por una raza de gigantes conocidos como quinametzin, los cuales fueron la especie dominante en el planeta antes de los humanos.

Finalmente, el extraño parecido de la ciudad con un tablero de circuitos de computadora, ha llevado a algunos a pensar que quizá esta ciudad fue construida por alienígenas, tal como sugieren con las Pirámides de Egipto.